NELSON ESPINA SE DIO EL LUJO DE PREPARAR ENTRE 8 Y 9 CABALLOS DE ARTURO VIDAL EN VIÑA DEL MAR

• Llegó como ayudante de capataz de su padre una vez que se cerró el Hipódromo de Antofagasta

Nelson Alonso Espina Lazo, más conocido como Lucas, es un preparador de caballos que se dio el lujo de tener en su corral entre 8 y 9 caballos del futbolista Arturo Vidal

“Soy hijo del jinete Nelson Espina que está en el norte y que se retiró cuando cerraron el Hipódromo de Antofagasta. Él se vino para acá a Viña del Mar, lamentablemente siempre estaba acostumbrado a trabajar conmigo. Yo le ayudaba mucho, a él ya que se desempeñaba como capataz. Pero siempre por el lado de mi madre, ella m insistió en  que primero tenía que terminar mis estudios”, comentó sus inicios.

Así fue como terminó este compromiso con su madre: “Yo saqué mi ingeniería, soy ingeniero mecánico y tengo varios títulos más. Pero en realidad me gustan más los caballos”.

“Tuve la mala suerte de perder a mi madre Angélica Lazo hace casi tres años y mi viejo estuvo mucho tiempo al lado de ella para cuidarla. Ella no se vino nunca para acá y yo estuve con mi viejo pero después él se fue”, agregó al rememorar este episodio.

Son cinco hermanos: “Yerko, que también fue un jinete extraordinario, ganador de muchas estadísticas en Antofagasta. Él no tuvo tantas oportunidades como las que hay ahora; Kevin Espina que es el que está corriendo ahora y es el hermano menor y las hermanas Giselle y Michelle, que es ingeniero”.

Recordó que con su padre se vinieron a Viña del Mar al cerrarse el hipódromo nortino: “A mi viejo no le gustó el clima de acá y al surgir el tema de mi madre se tuvo que ir y seguí yo. Yo llegué acá como empleado de mi viejo, yo le ayudé siempre en su trabajo de capataz. Cuando se tuvo que ir tuve que hacer lo que hacen todos. Yo tuve patente en Antofagasta de preparador, pero no me la consideraron, así que tuve que empezar de cero y por suerte me ha ido bien”.

Ya lleva alrededor de cuatro años: “Me ha ido bien. No me puedo quejar, le ha cuidado caballos a Arturo Vidal. No es muy grande mi caballada pero estamos ganando una carrerita de vez en cuando.

Eran tiempos en que Vidal jugaba en Barcelona y después en Inter: “Yo tuve caballos de él en Viña del Mar. Le llegué a tener entre 8 y 9 caballos. Con el tiempo Arturo cambió de equipo, ya no se preocupó tanto de los caballos que estaban corriendo sino que del haras. Después empezaron a deshacerse de los caballos y actualmente Arturo no tiene caballos acá en Viña”.

Nelson Espina está dedicado de lleno a su trabajo: “Vivo solo; tengo hijos de cuatro patas y dan mucho que hacer. Pero me gusta. Es un agrado. Cuando empiezan las carreras no halla la hora que empiecen y después no halla la hora que terminen porque uno quiere ir a descansar. Pero me ha ido bien y quiero seguir en la misma senda.