VOLUNTARIOS DE “ABRIGA UN HERMANO” SE PREPARAN PARA LLEVAR CENAS NAVIDEÑAS A PERSONAS QUE VIVEN EN LAS CALLES DE MOLINA

*Lamentan cierre de albergue gubernamental ya que las personas que allí residían vuelven a las calles

Durante treinta días los voluntarios de la Organización No Gubernamental “Abriga un hermano”, que preside Teresa Valderrama, se adjudicaron un proyecto del Ministerio de Desarrollo Social, que les permitió entregar durante treinta días, desayunos y cenas a personas en situación de calle.

La dirigente explicó que también han entregado yogur en algunos establecimientos educacionales y que colaboran con el comedor solidario de la Iglesia Bautista, con la que trabajan hace tiempo en estas tareas solidarias. Allí atienden tres veces por semana a 120 personas aproximadamente.

Sebastián Seguel, que forma parte de esta organización informó que el albergue gubernamental que se instaló en Molina, con cupos limitados, finalizó sus funciones el último lunes de noviembre pasado, volviendo esas personas a vivir en la calle, lo que resulta a todas luces una despreocupación ostensible de la autoridad.

Pero esta organización no se amilana y sigue trabajando con sus miembros activos y es así como ya están pensando en la cena de Navidad, que el año pasado fue todo un éxito al entregarse 120 comidas incluyendo regalos para los niños. Esa vez llegaron hasta Río Claro y ahora se están organizando para seguir en esta senda solidaria.

Esta organización está integrada a una red de alimentos, accediendo a productos próximos a vencer de los supermercados, los que obtienen a bajo costo y que aún pueden ser consumidos por el ser humano sin riesgo para la población.

La realidad en la comuna es que alrededor de 200 personas viven en situación de calle. Figuran ciudadanos bolivianos y venezolanos y otras personas de paso que trabajan como temporeros.